El protocolo de "Pensar en voz alta" es similar al "Estudio contextual", ya que consiste en preguntar a los participantes qué están pensando cuando observamos alguna acción que nos despierta dudas.

Es recomendable preparar plantillas para la recogida de datos de observación, pero esto puede obviarse si tras el test se planea hacer una entrevista.

La planificación de un test de usabilidad asegura que no se improvise y que el proceso de ejecución del test y de recogida de datos sean homogéneos con todos los participantes.

Cuando se planifica la evaluación de varios diseños alternativos, es importante que todos los participantes utilicen los diseños siempre en el mismo orden, para que los resultados sean comparables.

Para que el test de usabilidad se lleve a cabo correctamente, es imprescindible preparar una buena introducción para el usuario, en la que se aclaran varios aspectos, como dejarle claro que no se le evalúa a él, sino al diseño.